Repsol ha sido una de las empresas participantes en la jornada que se ha celebrado en Puertollano bajo el título ‘Rumbo a la transición energética en la logística’. La sesión ha estado organizada por Logistop, plataforma empresarial del sector del transporte de mercancías, el Ayuntamiento de Puertollano, la Cámara de Comercio de Ciudad Real y el Centro Nacional del Hidrógeno.
El director de producción de Refino del Complejo Industrial de Repsol en Puertollano, Antonio Lorenzo ha participado en la mesa redonda ‘Descarbonización del transporte de mercancías’ donde ha puesto de manifiesto la apuesta decidida de la compañía por los combustibles renovables como “solución real, competitiva e inmediata” para reducir emisiones de CO2 en el sector del transporte de mercancías por carretera, barco o avión.
Estos combustibles renovables, que pueden ser biocombustibles fabricados a partir de residuos de origen bio o combustibles sintéticos fabricados a partir de hidrógeno y CO2, “son una solución efectiva al transporte de mercancías para grandes flotas, no solo por la imposibilidad de este sector de optar por la electrificación sino porque pueden usarse hoy mismo sin necesidad de cambios en la tecnología de nuestros vehículos”.
Actualmente, cualquier transportista ya puede abastecer su vehículo con combustible renovable a partir de aceite de cocina usado y otros residuos, en más de 30 estaciones de servicio de Repsol en España y Portugal. En Castilla-La Mancha ya se ofrece este combustible líquido en las provincias de Ciudad Real y Toledo.
Este tipo de combustible 100% renovable es de baja intensidad en carbono. Se fabrica a partir de residuos (urbanos, de la agricultura, de bosques o incluso de plásticos reciclados) y materias primas renovables, que tienen cero emisiones netas. Al reutilizar los residuos como materias primas, fomentan el paso de la economía lineal a la economía circular.
Precisamente en la palanca de la economía circular es donde se apoyan los principales proyectos del Complejo Industrial de Repsol en Puertollano para avanzar en la transición energética y en la transformación industrial de la compañía, con el objetivo de alcanzar las cero emisiones netas en 2050.
En este sentido, Antonio Lorenzo recordó el proyecto de transformación de una unidad del complejo en una nueva planta de producción de combustibles renovables a partir de aceite de cocina usado, grasas animales y otros residuos de aceites vegetales. La unidad de Puertollano, que fabricará biodiesel, cuenta con una inversión de 120 millones de euros, aprobada el pasado mes de julio, y será la segunda planta en producir este tipo de combustible renovable después de la que Repsol está construyendo en el Complejo Industrial de Cartagena para fabricar biodiésel, biojet, bionafta y biopropano.
Desde el año 2020, el Complejo Industrial de Repsol en Puertollano fabrica biodiésel para la aviación, convirtiéndose así en el primer centro en España de producir este combustible renovable para aviones y desde más de una década se fabrica combustible con un 10% de materia renovable que es “el que estamos usando ahora mismo todos en nuestros coches y camiones”, ha destacado el director de producción.
Con respecto a los combustibles sintéticos, Lorenzo recordó el proyecto de la planta demo de combustibles sintéticos de Petronor que fabricará combustible a partir de CO2 e hidrógeno renovable, los denominados e-fuels.
Con el uso de estos biocombustibles avanzados será posible reducir entre un 65% y un 90% las emisiones netas de CO2 respecto a los combustibles tradicionales a los que sustituyen, aprovechando la infraestructura actual y evitando el desarrollo de nueva tecnología y la renovación de la flota. Los sectores que no pueden ser electrificados como la industria, que requiere altas temperaturas, o el transporte aéreo, marítimo o pesado, serán cubiertos por combustibles líquidos y gaseosos de baja intensidad de carbono.
El objetivo de Repsol es alcanzar una producción de 2 millones de toneladas en el año 2030 de este tipo de combustibles, 100% renovable.
Neutralidad tecnológica.
Durante la jornada, presidida por el director general de Transición Energética del Gobierno de Castilla-La Mancha, Alipio García y el alcalde de Puertollano, Miguel Ángel Ruiz, se destacó la necesidad de avanzar en investigación, tecnología e innovación para alcanzar soluciones inmediatas al transporte de mercancías por tierra, mar y aire.
En este sentido, Repsol puso el acento en la necesidad de una transición energética ordenada en la que la neutralidad tecnológica sea la pauta y en la que se apuesten por todas las soluciones posibles: la electrificación, el uso del hidrógeno renovable, la producción de combustibles renovables y tecnologías punteras como la captura y uso de CO2 o estrategias de producción como la Economía Circular y la revalorización de residuos
