Empate amargo el que logró el Formac Villarrubia ante la UD Poblense en la última jornada de la fase en la que lucha por su permanencia en Segunda División B. El duelo era clave para las aspiraciones de ambos equipos, y parecía que sólo los blanquiazules lo tenían claro desde un inicio en el que fueron a por todas. Una jugada aislada puso el empate a 10 minutos del final, en el que el partido se volvió loco y pudo acabar de cualquier forma. Monterrubio Torres, del colegio aragonés, no convenció a la grada local durante el tramo final del choque.
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