La Plaza del Ayuntamiento de Malagón se ha abarrotado de padres y niños de todas las edades, que han disfrutado de una de las novedades de la programación navideña de la localidad. Las campanadas infantiles han sido todo un éxito en su primera edición, repartiendo muchas golosinas y sonrisas entre los malagoneros más pequeños, que han sido los protagonistas.
Se han comprado en torno a 300 kilos de chucherías, quedando las sobrantes listas para repartirlas en la cabalgata de Reyes. También ha habido champagne sin alcohol para los que quisieron refrescarse tras comerse las 12 gominolas, en un ambiente navideño donde ha habido música, confeti e incluso presentadoras de las campanadas.
Los hinchables, la iluminación, o la decoración estética con el objetivo de animar a los vecinos a consumir y potenciar el comercio local, son otras de las iniciativas que el alcalde ha destacado para este fin de año que desea feliz a todos los vecinos de Malagón.